domingo, 3 de mayo de 2009

Tan caliente como el hielo



Ya sé lo que toca cada domingo, pero no tengo ni tiempo ni mucho menos ganas de ser mordaz (y que no sirva de precedente). Como compensación, catorce versos para entretener el alma.


Un hielo entre tus dedos se fecunda

lamiendo en miel salobre tu hondo frío

que se atera y lamina tu sombrío

pecho estático y polar, nieve rotunda.


Un témpano, una nube vagabunda:

sus pliegues son tus dientes, en vacío

gélido gangrenan tu piel de hastío

tan frígida, un glaciar en ti se inunda.


El frío es todo tuyo… pero a veces

también tuya es la chispa que reluce

y furiosa en tu amor te trepa y crece.


El fuego es todo tuyo… se reduce

la llama helada: ¡frío! pero a veces

también eres calor a todas luces.

1 comentario:

Rocío dijo...

Chico, tú prometes.

¡Qué bueno eres! Uf...

Besos.